Bacalao al horno con cebolla y pimiento

Vuelvo con otro estupendo guiso de pollo en el que añado diversas verduras y hierbas para obtener un plato riquísimo. Y como siempre muy sencillo de preparar! Solo tenéis que seguir unas pocas indicaciones y tendréis una comida para chuparos los dedos. Os lo aseguro. Vamos al grano y con la receta! :)
Cantidades un poco a ojo, según número de comensales:

       INGREDIENTES 

• Lomos de bacalao en su punto de sal (envasados. No necesitan sal. También podéis poner bacalao fresco, en cuyo caso tendréis que añadir la sal sal)
• 1 cebolla grande
• 2 pimientos verdes (de los alargados)
• 2 granos de pimienta de cayena o guindillas (acordaros de sacarlos una vez listo el guiso. Pican muchísimo!)
• 1 o 2 dientes de ajo
• Sal
• Aceite de oliva
• Vino blanco para guisar

        PREPARACIÓN 

- Picamos la cebolla y la ponemos a dorar con un poco de aceite en una sartén. Encendemos el horno, a 180 - 190º C para que se vaya calentando.



- Cuando la cebolla esté tierna, añadimos el pimiento y un poco de sal (al gusto), removemos bien y seguimos haciendo hasta que los pimientos estén también blanditos. Cuando las verduras estén listas las retiramos del fuego y las ponemos en una fuente apta para horno.





- Colocamos los lomos de bacalao encima de las verduras.






- En la misma sartén en que hemos preparado las verduras doramos el ajo troceado y las cayenas. Lo echamos todo sobre el bacalao, añadimos un buen chorro de vino blanco, y horneamos entre entre 15 - 20 minutos (según tamaño de los lomos) a unos 180ª C. 


- Cuando esté listo, lo sacamos, agitamos un poco la cazuela para que el bacalao suelte esa melosidad característica que tiene y ligue con salsa, y listo para comer. Queda riquísimo, con un ligero toque picante muy agradable, nada excesivo. En casa ya me están pidiendo que lo repita, esta vez con más cantidad porque quedó muy justo, para una cenita para dos. Os recomiendo que si podéis lo hagáis con los frescos, que cunden más. Ya veréis que acierto de plato. Delicioso!

Qué lo disfrutéis! :)

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Galletas de avena y puré de manzana

Hace unos días encontré esta receta en el borrador del blog, de la época danesa. Me había olvidado por completo de ella, jeje. La idea me la dio mi amiga Bergua, con unas galletas de solo dos ingredientes: copos de avena y plátano, y como yo en ese momento no tenía plátano a mano y sí puré de manzana, se me ocurrió que podía quedar bien también.Y así fue! El resultado son unas galletas abizcochadas, blanditas, y muy suaves. Yo les añadí canela a unas y chips de chocolate a otras, y quedaron realmente buenas. Os animo a que las probéis, con apenas dos ingredientes y el complemento que os guste, tendréis un desayuno o merienda sano y delicioso. Sin azúcar añadido, sin lactosa, sin gluten (mirad la avena) y sin apenas grasa. Fantásticas!
Para unas 12 galletas:

       INGREDIENTES 

• 200 gramos de copos de avena (de los cuales 80 en harina y 120 en copos. O mitad y mitad)
• 350 gramos de puré de manzana sin azúcar (solo manzana)
• Opcional: 20 gramos de chips de chocolate negro (en mi caso sin azúcar), canela, frutos secos, vainilla o lo que más os guste.

        PREPARACIÓN 

- Con la batidora o un robot de cocina molemos parte de los copos de avena (sin  tenéis harina de avena, os ahorráis el paso y es aún más rápido). Ponemos la harina y los copos de avena en un bol y añadimos el puré de manzana. Removemos bien hasta obtener una pasta lo más homogénea posible. La base de las galletas ya está lista.

- Ahora, según lo que nos apetezca, añadimos los complementos. En mi caso añadí: por un lado canela sobre las galletas ya formadas, y por otro chips de chocolate (sin azúcar añadido) que mezclé antes de formar las galletas. Una vez listas las galletas, se meten al horno precalentado a 200º C unos 30 minutos (o algo más) según la potencia del horno. En cualquier caso las vamos mirando. Cuando estén doradas por fuera y tiernas por dentro ya están listas. 

- Las sacamos del horno y las dejamos reposar sobre una rejilla para que no se reblandezcan demasiado (ya son más bien blanditas de por sí).

- Podemos comerlas en el momento o guardarlas en una lata o tupper. Si es así, yo recomiendo calentarlas un poquito cuando las vayamos a comer. Quedan genial- Ricas, ricas!

Qué las disfrutéis! :)

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Guisantes con jamón

Hoy traigo una de los platos de verdura preferidos en casa de siempre: Ni más ni menos que guisantes con jamón. Un primer plato o guarnición sencillo y muy fácil de preparar y que no puede estar más rico. Qué combinación tan deliciosa! Y en solo unos pocos minutos!

       INGREDIENTES 

• Una bolsa de guisantes congelados (o frescos, aunque aquí no se encuentran fácilmente)
• Un trozo de jamón
• Aceite de oliva
• Sal

        PREPARACIÓN 

- Ponemos a calentar agua con un poco de sal al gusto en una cazuela y cuando empiece a hervir echamos los guisantes congelados. Cuando vuelva a hervir, bajamos un poco el fuego y cocemos unos minutos (entre 5 y 8 según el tipo de guisante) hasta que los guisantes estén tiernos y a nuestro gusto.





- Cuando los guisantes estén a punto, apagamos el fuego y escurrimos los guisantes en un colador.




- Ahora vamos a rehogar los guisantes con el jamón. Para ello cortamos el jamón en trozos pequeños. 





- Calentamos un poco e aceite en la cazuela y freímos un poco el jamón.



- Cuando el jamón esté listo, añadimos los guisantes y removemos bien para que se rehogue todo por igual. Apagamos el fuego y dejamos reposar un par de minutos dentro de la cazuela.

- Cómo me gusta este plato! Espero que a vosotros también :)

Qué lo disfrutéis! :)

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Pollo con verduras al tomillo

Vuelvo con otro estupendo guiso de pollo en el que añado diversas verduras y hierbas para obtener un plato riquísimo. Y como siempre muy sencillo de preparar! Solo tenéis que seguir unas pocas indicaciones y tendréis una comida para chuparos los dedos. Os lo aseguro. Vamos al grano y con la receta! :)
Para unos 4:

       INGREDIENTES 

• 1/2 pollo en trozos
• Zanahorias
• 1 cebolla grande
• 1/2 pimiento rojo
• 1 o 2 pimientos verdes (de los alargados)
• 1 tomate maduro ( o un par de cucharadas de sofrito)
• Aceite de oliva
• Vino blanco para guisar
• Sal
• Pimienta negra molida
• Tomillo en polvo

        PREPARACIÓN 

- Quitamos la piel a los trozos de pollo (menos a las alas), salpimentamos al gusto y lo ponemos a dorar en la cazuela con un poco de aceite. Cuando esté listo lo sacamos y reservamos.

- A continuación ponemos a dorar en la misma cazuela la cebolla cortada en  tiras finas.




- Cuando esté lista, añadimos las zanahorias en rodajas y los pimientos en tiras pequeñas. Dejamos que se vayan haciendo, removiendo de vez en cuando.
Cuando las verduras empiecen a estar tiernas añadimos el tomate maduro con la base cortada hacia abajo, para que vaya soltando el jugo y contribuya a la salsa. Si preferís el sofrito, lo añadís también ahora.

- Dejamos unos minutos más, removiendo para integrar el tomate, y añadimos el pollo. Damos un par de vueltas.




- Añadimos un buen choro de vino blanco para guisar, que casi cubra los ingredientes. Rectificamos de sal si nos hace falta, incorporamos 1 o 2 cucharadas de tomillo, un poco al gusto, y dejamos cocer hasta que se consuma parte del líquido y el pollo se termine de hacer. 


- Cuando esté listo, apagamos y dejamos reposar unos minutos antes de servir. Con legumbres, arroz o cualquier otro grano ya tenemos la comida lista. Un plato completísimo y delicioso.

Qué lo disfrutéis! :)

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