Otro mes más vuelve Cocinas del mundo. En esta ocasión nos invita a descubrir la gastronomía nicaragüense y yo me he decidido por un plato vegetariano a base de tomate y plátano: "Macho en carrera", también conocido como "Peor es nada" (no me preguntéis de dónde han salido los nombres! =D ). Ideal como guarnición, un plato sencillo y muy agradable que os sorprenderá seguro.
INGREDIENTES
- 3 o 4 tomates maduros pero no muy blandos
- 2 o 3 plátanos macho (verdes)
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1 pimiento verde no muy grande (chiltoma)
- Zumo de naranja al gusto (yo puse 1 naranja no muy grande)
- Sal al gusto
- Opcional: chile picante para aderezar
PREPARACIÓN
- Lo primero que vamos a hacer es cocer los plátanos. La variedad verde o plátano macho no es dulce y hay que cocinarlo para comerlo. Si no encontráis, podéis hacerlo con plátano amarillo, que le dará un toque dulzón que seguro que queda muy bien también. Los pelamos y los cocemos durante unos 15 o 20 minutos, hasta que se ablanden. Cuando estén listos los colamos y los desmenuzamos con la ayuda de un tenedor. Reservamos.
- A continuación preparamos el resto de verduras: cortamos los tomates en cuadraditos y picamos la cebolla, el ajo y el pimiento.
- En una sartén ponemos a calentar 2 o 3 cucharadas de aceite y doramos la cebollas y el ajo durante unos minutos.
- Cuando estén tiernos añadimos el pimiento. Dejamos hacer unos minutos más.
- Seguidamente añadimos los tomates y dejamos cocinar unos minutos.
- Por último añadimos el plátano desmenuzado o machacado, removemos bien y dejamos otro par de minutos o así, para que se integre todo bien.
- Una vez listo el guiso, apagamos el fuego y añadimos el zumo de naranja y la sal al gusto. Damos otra vuelta y retiramos de la placa. Ya solo queda servir y degustar.
- Este plato queda muy bien como guarnición de carne o pescado. También hay quien lo acompaña con huevos, incluso los añaden al sofrito en ocasiones. Otra buena opción es servirlo con algún tipo de queso blanco tierno, en plato o sobre pan. Como veis hay muchas posibilidades, todas magníficas. Una buena forma de descubrir la gran cocina de Nicaragua, que me ha sorprendido y sobre todo me ha encantado.
- Lo primero que vamos a hacer es cocer los plátanos. La variedad verde o plátano macho no es dulce y hay que cocinarlo para comerlo. Si no encontráis, podéis hacerlo con plátano amarillo, que le dará un toque dulzón que seguro que queda muy bien también. Los pelamos y los cocemos durante unos 15 o 20 minutos, hasta que se ablanden. Cuando estén listos los colamos y los desmenuzamos con la ayuda de un tenedor. Reservamos.
- A continuación preparamos el resto de verduras: cortamos los tomates en cuadraditos y picamos la cebolla, el ajo y el pimiento.
- En una sartén ponemos a calentar 2 o 3 cucharadas de aceite y doramos la cebollas y el ajo durante unos minutos.
- Cuando estén tiernos añadimos el pimiento. Dejamos hacer unos minutos más.
- Seguidamente añadimos los tomates y dejamos cocinar unos minutos.
- Por último añadimos el plátano desmenuzado o machacado, removemos bien y dejamos otro par de minutos o así, para que se integre todo bien.
- Una vez listo el guiso, apagamos el fuego y añadimos el zumo de naranja y la sal al gusto. Damos otra vuelta y retiramos de la placa. Ya solo queda servir y degustar.
- Este plato queda muy bien como guarnición de carne o pescado. También hay quien lo acompaña con huevos, incluso los añaden al sofrito en ocasiones. Otra buena opción es servirlo con algún tipo de queso blanco tierno, en plato o sobre pan. Como veis hay muchas posibilidades, todas magníficas. Una buena forma de descubrir la gran cocina de Nicaragua, que me ha sorprendido y sobre todo me ha encantado.
Qué lo disfrutéis! J
Una combinación bien diferente :-)
ResponderEliminarUn saludito
Sí, diferente y deliciosa! :) Saludos!
EliminarEsta vez muchos nos hemos decantado por los platanos macho. Admite cantidad de variaciones....yo solo le habia probado frito en tostones pero ya veo que se le puede sacar mucho partido.
ResponderEliminarNos vemos en España !!!!! jajaja
Besitos
Sí verdad? Yo nunca me habría imaginado tanta posibilidad. Y quedan genial! :)
EliminarNos vemos en España! Besos Teresa!
¡Me hubiera encantado estar cerca para probarlo! Suena genial con el plátano =D Creo que cuando llegue a España lo voy a probar como sugieres, con queso blanco. Se me hace la boca agua jeje ¿Te suena el recipiente en el que he servido mi sopa? =P Mil besos
ResponderEliminarCon queso queda guay! Es como lo hemos comido. Yummi! :) Se me olvidó comentarte lo del recipiente de tu sopa pero sí, me sonaba muchísimo, jeje! Mil y mil besos!
EliminarEstoy segura de que habéis disfrutado con este plato en casa, solo hace falta ver las fotos. Debe tener un sabor agridulce de los que me gustan a mí.
ResponderEliminarUn besote,
Si, quedó muy rico Mar. Te lo recomiendo :) Besos!
EliminarAjajajajaja, que gracia el nombre! Pero tiene una pinta estupenda, con unas papas fritas ya ni te cuento! aiiiiiiiiiiiiiiii, que hambre! Un besito
ResponderEliminarSí, jajaja! Así es como descubrí la receta. Me llamó mucho la atención el nombre y me entró curiosidad. Luego fue leer los detalles y decidirme por ella al momento. Queda muy rica. Besos Maggie!
Eliminar